El Festival Internacional de Música Iberoamericana de Madrid va por su VII edición, constituyéndose en un festival de referencia en cuanto a la difusión de música culta de origen iberoamericano. Las composiciones, que son interpretadas, abarcan un amplio abanico de estilos y épocas, destacando piezas contemporáneas de compositores actuales de todo el orbe. El próximo concierto será el 22 octubre, a las 19 horas, en el Museo Picasso de Buitrago de Lozoya (Madrid), donde compositores iberoamericanos se inspiran en las obras del museo para conmemorar el día de las Naciones Unidas y rendir homenaje musical a Picasso.
El intenso calendario de conciertos se puede consultar en la Web de Festival: https://www.fimim.org/calendario/. Entre los colaboradores del Festival está el Instituto Camões, la UNESCO, la OEI, el Real Conservatorio de Música de Madrid, el Ayuntamiento de Getafe y la Casa de Valencia de Madrid.
Desde EL TRAPEZIO hemos tenido la ocasión de acudir a uno de los conciertos del mes de octubre, realizado en el auditorio de la Casa de Valencia de Madrid, en una matiné a las 12:00 horas. Una experiencia muy grata en la que se pudo escuchar una selección obras de jóvenes compositores argentinos, paraguayos y españoles, que presentaron sus creaciones junto a otros más veteranos, fomentando un diálogo generacional e intercultural, en una labor continua en el estímulo de la creación e interpretación de música de cámara.
Al finalizar el evento, charlamos con el director, René Mora, a la par impulsor del FIMIM desde sus inicios.
¿Cuándo surge esta idea y de dónde surge la iniciativa de este festival?
Surgió hace unos 10 u 11 años en un viaje que hicimos a Buenos Aires con Vicente Cintero, flautista que es presidente de Casa de Valencia, donde celebramos bastantes conciertos. En este viaje contactamos con compositores argentinos, hicimos un concierto en el teatro Colon estrenamos y llevamos compositores españoles allí y aquí. Hemos interpretado con compositores argentinos, y a raíz de eso pues queríamos ya expandir esta idea, ya no solamente hispanoamericana, sino para promover la música iberoamericana.
Todo un ejemplo de tenacidad, ¿son ya 10 años de FIMIM?
Esta es la 7ª edición, la octava el año que viene, pero la idea original surgió de ese viaje a Buenos Aires hace algo más de una década y pensamos seguir el tiempo que se pueda.
¿Con qué tipo de apoyos contáis, alguno institucional, o es una iniciativa puramente privada?
Por el momento es puramente privada y de esfuerzos propios. Están demorándose mucho las subvenciones oficiales y privadas con las que nos gustaría contar, pero esperamos que lleguen en breve.
¿Cuál es la filosofía general del festival?
Pues realmente de doble partida, somos una parte del mundo, la mitad del mundo occidental, que es el mundo iberoamericano y es muy importante la presencia, el papel en el mundo de la gente de iberoamericana, el pueblo, las naciones y su futuro. Es inseparable, la gente y la música la música y la gente. El aspecto humano va siempre unido al musical.
¿Creo que promovéis nuevas composiciones?
Sí, dentro de la música tratamos de promover las composiciones de jóvenes valores y las de otras generaciones mayores, cuyas composiciones son menos conocidas.
Llama mucho la atención que en el repertorio de cada concierto, en algunas ocasiones, se encuentre entre el público alguno de los compositores de las obras que se interpretan. ¿Eso es para el FIMIM un valor añadido?
Sí, es un valor añadido. La idea es que los compositores viven como en todas las épocas. Interpretamos piezas de personas vivas y reales, y no solo composiciones de figuras fallecidas.
¿En qué fechas y lugares este festival?
Desarrollamos este festival a lo largo del año, tratando de coincidir siempre con días especiales de celebraciones especiales de la UNESCO. Por ejemplo, hoy este concierto, que hemos tocado, es sobre aves migratorias.
Damos conciertos a lo largo de todo el año, con un intenso calendario y un variado repertorio.
¿Organizará el FIMIM, en breve, algún concierto al otro lado del charco?
Esperamos que sí, que el mundo mejore en general y que podamos volver a nuestras costumbres, dando conciertos en Iberoamérica y recibiendo músicos de América, aquí en Madrid y en España en general.
