Agricultores, ecologistas, científicos y entidades gubernamentales han presentado en Miranda do Douro, Portugal, el proyecto «LIFE SOS Pygargus», una ambiciosa iniciativa para proteger al aguilucho cenizo, una rapaz amenazada que anida en campos abiertos. Con un presupuesto de casi 11 millones de euros, financiado en un 75 % por el Programa LIFE de la Unión Europea, el proyecto busca frenar el declive de la especie en un periodo que abarca de 2024 a 2030.
La siega temprana de cereales durante el periodo reproductivo del aguilucho cenizo es una de las principales amenazas para la especie, causando la destrucción involuntaria de nidos y crías. Por ello, el proyecto se centra en adaptar las prácticas agrícolas al ciclo reproductivo de esta rapaz y fomentar la colaboración con agricultores. Además, tiene como meta reducir en un 75 % la mortalidad y aumentar en un 50 % la población reproductora, a través de campañas de salvamento, rescate y concienciación pública.
El proyecto abarcará 49 zonas de especial protección para las aves de la Red Natura 2000 en España y Portugal, áreas que albergan las principales poblaciones transfronterizas del aguilucho cenizo. Según José Pereira, presidente de «Palombar-Conservação da Natureza e do Património Rural», esta iniciativa tiene un impacto significativo tanto en la conservación de la naturaleza como en el apoyo al sector agrícola. Autoridades como María Jesús Palacios, de la Junta de Extremadura, y Sandra Sarmento, del Instituto de Conservación de la Naturaleza y Bosques de Portugal, han resaltado la importancia de esta cooperación ibérica para garantizar el éxito del proyecto y la preservación de esta especie.
