Un total de dieciocho ministros de España y Portugal participarán el próximo viernes en la XXXIII Cumbre bilateral que presidirán el jefe del Gobierno, Pedro Sánchez, y el primer ministro portugués, António Costa, en la Pousada de Viana do Castelo. Esta Cumbre durará una mañana y su plenaria coincidirá con una comida conjunta. No obstante, tiene una mayor expectativa y proyección mediática por la alianza de la «excepcionalidad ibérica» en el marco de la Unión Europea.
En concreto, por parte española estarán presentes la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y la vicepresidenta tercera y titular de Transición Ecológica, Teresa Ribera. Junto a ellas acudirán los ministros de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares; Interior, Fernando Grande Marlaska; Transportes, Raquel Sánchez; Industria, Reyes Maroto; Política Territorial, Isabel Rodríguez; Ciencia, Diana Morant; e Igualdad, Irene Montero.
La cooperación en materia energética será uno de los principales asuntos de la cita de Viana do Castelo después del trabajo conjunto que están haciendo Sánchez y Costa para impulsar las interconexiones de la Península Ibérica. En ese contexto, estudiarán las cuestiones que se tratarán en la reunión que mantendrán el próximo 9 de diciembre en Alicante con el presidente francés, Emmanuel Macron, para concretar detalles del corredor de energía verde denominado Barmar, que unirá Barcelona con Marsella y que se ha pactado como alternativa al Midcat transpirenaico al que se oponía Francia.
En la Cumbre está previsto que, además de una declaración conjunta, se firmen varios acuerdos en el ámbito de la Estrategia Común de Desarrollo Transfronterizo, entre ellos el relativo a la puesta en marcha en Cáceres de un Centro Ibérico de Investigación en Almacenamiento Energético. También se acordará el desarrollo de una constelación de satélites de observación de la tierra, la rehabilitación de los pilares y traviesas del puente internacional sobre el río Miño entre Salvaterra y Monção, y la instalación de un carril bici en el puente internacional sobre el Guadiana entre Ayamonte y Vila Real de Santo António.
