Durante el año 2023 se recuperaron más de 2.174 olivos en la península ibérica gracias a los proyectos de transición justa de la empresa eléctrica Endesa y ‘Apadrinaunolivo.org’, que se unieron para este proyecto de Andorra y de Pego, Portugal, con el objetivo no solo cambiar el carbón por energías renovables, sino hacerlo con un nuevo plan de acompañamiento local. Además de la recuperación de olivos abandonados, que fueron 1.000 en Andorra y 1.074 en Pego, los proyectos lograron un impulso de personas que se unieron al mismo, ya que se adhirieron casi 1.000 padrinos en ambos países, y se contrató más mano de obra para recuperar estos árboles.
En Andorra, contrataron 25 personas y el objetivo hasta 2028 es la incorporación de más de 250 más. En Pego, en la región de Abrantes, donde el proyecto arrancó el verano pasado, ya se ficharon a tres personas y la meta que tienen es crear hasta 27 puestos de trabajo. Los focos de estos trabajos son, principalmente, las inmediaciones de la central térmica andorrana, que está en desmantelamiento, donde hay extensiones de olivos con una variedad única de aceituna, la manzanota, y en Pego, cerca de la central térmica, también cerrada, se encuentra el olivo más antiguo de la península ibérica.
El objetivo de esta colaboración entre las empresas es la recuperación en la península ibérica de un total de 70.000 olivos abandonados. A esta recuperación añadirán medidas que ayuden a fijar población en las zonas citadas. Igualmente, en ambos proyectos se colaborará con una conservera local para que amplíen su producción y la lleven a cabo con el aceite con denominación de origen apadrinado.
