Fue el Dr. Gabriel Moreno, querido amigo de la raia y profesor de derecho constitucional de la Universidad de Extremadura, quien tuvo la genial idea de invitarme a escribir sobre Cooperación Transfronteriza en la obra colectiva “Reformas para la cohesión territorial de España”[1]. Así comenzó el reto. Una prueba estimulante y disruptiva que me llevó a compartir mi opinión (forjada desde la frontera hispano-lusa durante más de una década) sobre las oportunidades de la cooperación transfronteriza, con reconocidos académicos y profesores de diversas universidades del país.
Bajo este marco de referencia y gracias al apoyo del Ministerio de Política Territorial del Gobierno de España me dispuse a escribir el articulo “La cooperación y la estrategia transfronteriza ante el reto territorial: la frontera como oportunidad de futuro”[2], donde abordo el reto territorial y demográfico en los territorios de frontera desde una perspectiva local, aprovechando las ventajas de la cooperación transfronteriza. Para ello, desarrollo temáticas como la configuración del territorio de la frontera luso-española; la gobernanza y las estructuras territoriales; los instrumentos jurídicos y los medios financieros existentes al servicio de la cooperación territorial; las experiencias exitosas, materializadas en Eurociudades y Agrupaciones Europeas de Cooperación Territorial; y finalmente, presento un relacional de conclusiones con el objetivo de abrir el debate sobre cómo puede la cooperación transfronteriza apoyar el desarrollo territorial en la raya luso-española.
A modo de preámbulo y siguiendo el objetivo de la presente “Invitación a una lectura”, comienzo por referir un hecho irrefutable y es que la eliminación de las fronteras y el impulso de la cooperación territorial entre los Estados miembros de la Unión Europea (en adelante, UE) han sido y son sinónimos de integración y solidaridad, principios inherentes a la propia UE. Desde su creación hace más de setenta años, la UE viene promoviendo políticas y acciones encaminadas al fomento de la cohesión territorial y la lucha contra los desequilibrios regionales. Sin embargo, muchas áreas fronterizas todavía comparten una situación marginal en el marco europeo y nacional con problemas de accesibilidad y de conexión con el exterior, así como de vertebración interna. Esta localización periférica, alejada de los centros de decisión nacional, ha influido en la pervivencia de un fuerte desequilibrio y contraste de los indicadores de desarrollo socioeconómico en comparación con otros territorios europeos, que se manifiestan en unas débiles densidades de población, la desarticulación del tejido económico y la deficiente oferta de todo tipo de servicios. Además, la separación física y administrativa se acentúa en estos territorios vecinos que han estado durante siglos «de espaldas giradas» con una frágil convivencia debido a las diferencias de normativas, de planificación y de estructuras de gestión que no han ayudado a maximizar la capacidad de integración y a rebajar el grado de divergencia de desarrollo económico entre ambos lados.
La frontera luso-española, considerada la más estable, antigua y extensa de toda la UE, cuenta con una larga tradición en materia de cooperación y un gran número de actores especialmente activos y participativos, como queda de manifiesto en las más de 1.600 entidades[3] que, en el transcurso de los últimos veinte años, han promovido iniciativas de cooperación al abrigo del programa INTERREG España-Portugal[4]. No obstante, aun habiéndose producido una incuestionable mejora de los niveles de desarrollo en estas regiones, todavía se dan valores muy preocupantes y con propensión a agravarse. En efecto, los escenarios proyectados en los próximos años apuntan hacia una continuidad de las tendencias de depresión en los espacios periféricos, tales como la pérdida constante de población y el crecimiento vegetativo negativo, consecuencia de la caída de la natalidad y el aumento del envejecimiento. Estos factores generan un círculo vicioso en tanto que la despoblación se retroalimenta, complicando el futuro de las zonas de origen como consecuencia de la pérdida de capital humano.
Ante este contexto, «la cooperación transfronteriza surge como una estrategia necesaria para contradecir las tendencias negativas y de marginalización, así como de potenciar y valorizar un territorio que presenta riquezas y oportunidades conjuntas»[5]. Se trata de una frontera heterogénea y, por tanto, para algunas regiones y pueblos la cooperación constituye una oportunidad para el desarrollo sostenible, la implicación en proyectos dinámicos y la captación de fondos. Es más, se presenta como una oportunidad que considera el contexto particular territorial en las estrategias de desarrollo, erigiéndose como el mejor instrumento para generar masa crítica de población esencial para favorecer las políticas de cohesión a través de la participación de los actores regionales, locales y sociales.
La problemática derivada de la pérdida continuada de población en los territorios de la raya luso-española, y la necesidad de adoptar medidas para revertir el reto demográfico y territorial cobra especial importancia en el ámbito local, ante el cual se presentan con mayor dureza las consecuencias de esta realidad. Se trata, además, de un reto que no puede ser asumido en solitario, sino que es necesario llevar a cabo actuaciones coordinadas entre las diferentes Administraciones Públicas. La cooperación intermunicipal y las relaciones interadministrativas, tanto con el nivel estatal como autonómico (en el caso español), requerirán de un enfoque transnacional en su tratamiento, adoptando medidas y estrategias conjuntas. Pero también de una cooperación de proximidad que permita ofrecer la mejor atención a los ciudadanos, con independencia de su lugar de residencia, sin descartar agrupaciones entre municipios aprovechando los instrumentos jurídicos que la UE pone a disposición.
Otra cuestión fundamental a la hora de abordar la problemática territorial es la necesidad de prestar servicios de manera conjunta para los ciudadanos que viven en regiones periféricas. El acceso a los servicios públicos, como el transporte, la educación o la atención sanitaria, suele ser más limitado en comparación con las regiones centrales y las capitales. Esto es especialmente cierto en las localidades fronterizas poco pobladas con altos índices de envejecimiento de la población. La prestación de servicios públicos a través de las fronteras no solo aumentaría la calidad de vida de los ciudadanos de ambas partes, sino que también haría que los servicios públicos fueran más rentables. En este sentido, el Comité Europeo de las Regiones «subraya la necesidad de un marco jurídico de la UE que permita establecer y gestionar de manera eficiente servicios públicos transfronterizos, destinados a satisfacer las necesidades de los ciudadanos que viven en regiones fronterizas»[6]. Por tanto, se trata de un reto multinivel donde todos los niveles de gobierno deben trabajar conjuntamente y de forma transversal para lograr soluciones a medio y largo plazo.
La cooperación transfronteriza para ser realmente efectiva necesita afrontar una serie de desafíos importantes, que se han ido poniendo de manifiesto a lo largo de los últimos veinte años. Se trata de cuestiones relacionadas con la voluntad política, la dificultad de gestionar las asimetrías institucionales, el desconocimiento de los instrumentos jurídicos, la cuestión idiomática, los recursos financieros o la integración de los actores clave de la sociedad, imprescindibles para abordar cualquier posible estrategia de cohesión territorial. Pero también, como se mencionó́ anteriormente, son muchas las problemáticas compartidas que justifican un enfoque transfronterizo: la despoblación, el éxodo del rural o la hiperconcentración poblacional, todas ellas se dan a ambos lados de la frontera de forma simultánea y exigen una respuesta conjunta e inmediata para revertir la tendencia al ostracismo de estos territorios.
En definitiva, se trata de un reto que no es posible asumirlo en solitario, que exige construir una cooperación sólida y proyectada al futuro en la cual será necesario aunar voluntades, crear verdaderas estructuras de gestión compartida, buscar espacios de encuentro entre las Administraciones Públicas y la sociedad civil, trabajar con una perspectiva a medio y largo plazo que sea capaz de lograr que todos los actores se sientan involucrados y participen en ella. En ese camino conviene no perder de vista el proyecto original para la construcción de la UE expresado por Jean Monnet, el cual pretendía «no tanto coaligar estados, sino unir a los hombres»[7], y para ello harán falta, junto con los recursos económicos, grandes dosis de entendimiento, de convicción y, sobre todo, de unidad[8].
Espero, querido lector, haberte despertado el interés por la frontera y que me acompañes en ese mismo itinerario. La obra propuesta será una magnifica hoja de ruta.
El articulo completo está disponible en la obra colectiva «Reformas para la cohesión territorial de España», Marcial Pons, Ediciones Jurídicas y Sociales, Madrid, 2022, PP. 199-217 https://www.marcialpons.es/libros/reformas-para-la-cohesion-territorial-de-espana/9788413814674/
Pablo Manuel Rivera Búa
BIBLIOGRAFÍA
Medina-García, E., «La cooperación transfronteriza entre España y Portugal en perspectiva», Ciudad y Territorio-Estudios Territoriales, vol. 53, núm. 209, 2021, pp. 633-646.
Moreno González, G., (Dir.) Gabriel, Rodríguez García, I. (pr.) «Reformas para la cohesión territorial de España», Marcial Pons, Ediciones Jurídicas y Sociales, Madrid, 2022, disponible en https://www.marcialpons.es/libros/reformas-para-la-cohesion-territorial-de-espana/9788413814674/
Mission Opérationnelle Transfrontalière (MoT), L’ Observation des Territoires Transfrontaliers. Les Cahiers de la MOT, núm. 9, 2014.
Rivera Búa, P. M., «La cooperación y la estrategia transfronteriza ante el reto territorial: la frontera como oportunidad de futuro», Reformas para la cohesión territorial de España, Marcial Pons, Ediciones Jurídicas y Sociales, Madrid, 2022, PP. 199-217.
Santos Soeiro, J. (dir.), y Beltrán, C. (coord.), Una frontera que nos une, una frontera de desarrollo. Balance de la cooperación transfronteriza España-Portugal 2000-2014, España, RIET, 2016.
NOTAS
[1] Gabriel Moreno González (dir.), Isabel Rodríguez García (pr.) «Reformas para la cohesión territorial de España», Marcial Pons, Ediciones Jurídicas y Sociales, Madrid, 2022, disponible en https://www.marcialpons.es/libros/reformas-para-la-cohesion-territorial-de-espana/9788413814674/
[2] P.M. Rivera Búa, «La cooperación y la estrategia transfronteriza ante el reto territorial: la frontera como oportunidad de futuro», Reformas para la cohesión territorial de España, Marcial Pons, Ediciones Jurídicas y Sociales, Madrid, 2022, PP. 199-217.
[3] Datos disponibles en https://www.poctep.eu/es/2007-2013/lista-de-beneficiarios-poctep (consultado el 4 de marzo de 2022).
[4] INTERREG: instrumento de financiación de desarrollo regional diseñado en el marco de la Po- lítica de Cohesión Europea, disponible en https://www.poctep.eu/es/inicio-2014-2020 (consultado el 4 de marzo de 2022).
[5] J. Santos Soeiro (dir.) y C. Beltrán (coord.), Una frontera que nos une – una frontera de desarrollo. Balance de la cooperación transfronteriza España-Portugal 2000-2014, España, RIET, 2016, p. 40.
[7] Mission Opérationnelle Transfrontalière (MoT), L’ Observation des Territoires Transfrontaliers. Les Cahiers de la MOT, núm. 9, 2014, p. 55.
[8] E. Medina-García, «La cooperación transfronteriza entre España y Portugal en perspectiva», Ciudad y Territorio-Estudios Territoriales, vol. 53, núm. 209, 2021, p. 646.
BIOGRAFÍA
Pablo Manuel Rivera Búa es doctorando en Unión Europea por la UNED. Licenciado en Derecho y en Ciencias Políticas y de la Administración por la Universidad de Santiago de Compostela, con especialidad en RRII. Cuenta con dos Másteres oficiales: en Políticas Comunitarias y Cooperación Territorial; y en Comercio Internacional. Es especialista en Organismos Multilaterales y Licitaciones Internacionales; y titulado en Gestión estratégica de proyectos financiados con fondos europeos por ESADE. Como director ejecutivo de la Agrupación Europea de Cooperación Territorial Euro-Ciudad Chaves-Verín (España-Portugal) ha alcanzado importantes logros para la institución como la obtención del galardón RegioStar “City Star”, distinción al proyecto más innovador de cooperación territorial de la Unión Europea. Autor de LA COOPERACIÓN Y LA ESTRATEGIA TRANSFRONTERIZA ANTE EL RETO TERRITORIAL: LA FRONTERA COMO OPORTUNIDAD DE FUTURO. Reformas para la cohesión territorial de España. Madrid, Marcial Pons, Ediciones Jurídicas y Sociales, 2022.
