La Candidatura Ibérica al Mundial 2030 de fútbol ha recibido este viernes su bautismo en los minutos previos al amistoso entre España y Portugal. El Wanda Metropolitano, escenario del partido, ha sido también el del acto protocolario que da oficialidad al proyecto, aprovechando la alta audiencia televisiva y los 15.000 espectadores presenciales.
Los cuatro han dado apoyo institucional a los máximos dirigentes de las federaciones, el español Luis Rubiales por la RFEF y Fernando Soares Gomes da Silva por la FPF. Ellos dos han sido encargados de plasmar la firma al documento oficial y tras ellos, los jefes de los respectivos Ejecutivos.
Rubiales ha afirmado que este pacto “más que una unión es una fusión” y ha puesto en valor las playas, el tiempo, la gente y la gastronomía de España y Portugal. Su homólogo portugués Soares ha declarado que, tras el primer intento frustrado de candidatura en 2010 para el Mundial de 2018, en esta ocasión para 2030 se dan todas las condiciones de lograrlo, así como ha recordado los títulos y la experiencia de la organización de grandes eventos en la península ibérica.
Los jefes de Estado y de Gobierno se han puesto bufandas con los nombres de España y Portugal, mientras que los jugadores de ambas selecciones han llevado en la camiseta una referencia a la candidatura ibérica. La noche de la víspera se iluminaron las fachadas del estadio Metropolitano y del Ayuntamiento de Madrid en Cibeles con los colores de Portugal. Previamente a los actos, Felipe VI ha recibido a Marcelo Rebelo de Sousa en el Palacio Real y han comido juntos en una terraza de un restaurante de la plaza de Oriente.