El actual primer ministro de Portugal desde 2015, el socialista António Costa, ha logrado la mayoría absoluta de los diputados de la Asamblea de la República, concentrando el voto útil de la izquierda. Costa ha pasado de la necesidad imperiosa de la negociación presupuestaria, en el marco de la alianza parlamentaria de la geringonça, a meterse directamente el juguete de la geringonça en el bolsillo: ya no necesitará el apoyo parlamentario de un Partido Comunista y un Bloco de Esquerda en claro declive.
Lejos quedan los malos augurios de las últimas semanas, donde ya se le estaba buscando empleo en Europa; se hablaba de una Gran Coalición PS-PSD o de una probable geringonça de derechas, en una atmósfera de euforia de unas derechas movilizadas. Finalmente, el plan de Costa ha tenido éxito, como se lo ha reconocido Pedro Sánchez en un tweet: “Parabéns, querido António Costa, por tu victoria. Portugal ha apostado una vez más por un proyecto socialdemócrata que aúne crecimiento y justicia social. Juntos seguiremos impulsando en nuestros países y en Europa una respuesta socialista a los retos que compartimos”.
No sólo el campo de la izquierda ha modificado su correlación de fuerzas, también ha ocurrido en la derecha, que destaca la caída del CDS y el crecimiento de Chega e Iniciativa Liberal. El ganador de la noche, António Costa, ha afirmado ante una militancia en clima de fiesta que “esta ha sido una victoria de la confianza, la humildad y la estabilidad”. El primer ministro ha declarado que “una mayoría absoluta no es un poder absoluto”, afirmando que quiere gobernar para todos los portugueses y con respeto a todas las instituciones. También ha destacado el civismo de los portugueses por el aumento en la participación electoral, un problema histórico de la democracia lusa. Por último, ha expresado su deseo de movilizar todas las energías para la recuperación económica.
Los resultados, a falta de 4 diputados por elegir, son los siguientes:
Opinión pública ibérica
RTVE se ha movilizado por primera vez en la cobertura de las elecciones lusas, tanto por el canal de televisión 24 horas como por Radio 5, con conexiones en directo y tertulia. Esto supone un avance para la creación de una opinión pública ibérica, como defiende la línea editorial de EL TRAPEZIO.