El Palacio Real ha acogido, con presencia de los tres poderes del Estado y del presidente del Consejo Europeo, António Costa, el acto de conmemoración de los 40 años de adhesión española e ibérica a la Unión Europea. Felipe VI ha reivindicado este jueves la Unión Europea como garantía de paz, libertad y prosperidad y ha pedido que no se permita ahora que las divisiones y los conflictos debiliten precisamente este proyecto que nació para superarlos, ya que sigue siendo, «hoy más que nunca, una necesidad para todos». Por deferencia a António Costa y al embajador de Portugal, Felipe VI ha dedicado unas palabras en portugués: «Gostaria de expressar os nossos parabéns aos amigos e vizinhos por esta data que partilhamos».
Por su parte, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha hecho un llamamiento a «cuidar Europa», junto con los «hermanos portugueses», ante el riesgo de no apreciar todos los logros que ha supuesto para España, país que, cuarenta años después de su adhesión a la UE, ha pasado de ser «vagón de cola» a «locomotora» del club comunitario. «La fortaleza actual de Europa emana de su unidad, y esa unidad es y ha sido posible en gran medida gracias a la aportación de la península ibérica», ha añadido.
Antes de ceder la palabra al presidente del Consejo Europeo, la presentadora del evento ha afirmado que «Portugal es un país que nunca dejará de ser aliado». En su discurso, António Costa ha defendido a la Unión Europea como «el mejor proyecto de solidaridad entre pueblos, una casa común», que ayuda a los europeos a afrontar juntos «los buenos y malos momentos». Por eso, ha reivindicado esa «página de la historia que España y Portugal han escrito juntos».
El acto, en el que se han intercalado diferentes actuaciones musicales, la última de ellas con el himno de Europa, ha tenido lugar en el Salón de Columnas del Palacio Real, el mismo lugar en el que firmó el Tratado de Adhesión, cuyo documento original ha sido situado en la ‘Mesa de las esfinges’. Se trata de una de las piezas más emblemáticas de mobiliario de la colección de Patrimonio Nacional y sobre la que se estampó la firma del Tratado a las que se denominaban las Comunidades Europeas, un ingreso que se hizo efectivo junto al de Portugal el 1 de enero de 1986.
