Lula acusa a Bolsonaro de viajar al funeral de Isabel II para hacer campaña

"¿No sería mejor que el genocida visitara familias de personas que murieron de Covid?", ha cuestionado el líder del Partido de los Trabajadores

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El expresidentente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva, favorito para las elecciones de octubre, ha acusado este domingo al jefe de Estado de Brasil, Jair Bolsonaro, de hacer campaña durante su viaje a Londres con motivo del funeral de Isabel II de Inglaterra. Lula, quien gobernó Brasil entre 2003 y 2010, ha considerado «loable» que Bolsonaro acuda al funeral de la reina, pero ha condenado que aprovechara el viaje para «hacer discurso» y «criticar a la izquierda» ante un grupo de seguidores en Londres.

«¿No sería mejor que el genocida visitara familias de personas que murieron de Covid?», ha cuestionado el líder del Partido de los Trabajadores (PT) durante un acto de campaña en Florianópolis, capital del estado de Santa Catarina, cuando faltan dos semanas para las elecciones presidenciales. El antiguo sindicalista, líder en las encuestas con 45% de las intenciones de voto, frente al 33% de su rival, ha afirmado que Bolsonaro acudió a Londres porque «está necesitando imagen a nivel internacional».

El líder de la ultraderecha brasileña ha llegado este domingo a Londres para participar el lunes en el funeral de la reina Isabel II, fallecida el pasado 8 de septiembre a los 96 años de edad. A su llegada a la capital inglesa, Bolsonaro se ha dirigido a sus seguidores desde el balcón de la residencia oficial del embajador brasileño en un discurso con un marcado tono electoral, en el que aseguró que vencerá las elecciones en la primera vuelta, pese a que todos los sondeos le dan una desventaja de más de diez puntos porcentuales.

«No hay como no ganar en la primera vuelta», ha afirmado Bolsonaro, quien ha cuestionado reiteradamente la fiabilidad del sistema electoral, pese a que no existen denuncias de fraude desde su implantación en 1996. El líder de la ultraderecha brasileña ha insistido en su agenda ideológica y ha recalcado que la mayoría de los brasileños no acepta discutir la legalización del aborto, la despenalización de las drogas y la llamada «ideología de género».

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