140.000 portugueses viven y trabajan en España, convirtiéndose en el segundo país europeo con más emigrantes lusos. Con diferentes edades y profesiones, el talento portugués es mucho, y se ha reunido en un encuentro virtual para contar sus vivencias en un país que se sienten como en casa.
«Siempre he sido muy bien recibido. Nunca ha habido ningún tipo de sentimiento negativo contra los portugueses», comenta el presidente de Vodafone España, António Coimbra. Es más, hace ocho años, Coimbra consiguió colocar a la multinacional de las telecomunicaciones en la cima de, como el propio empresario dice, «un mercado muy complicado. Es el más competitivo de Europa y uno de los más competitivos del mundo».
Si hay un lugar que es un pedazo de Portugal en España es la Embajada. En esta conversación digital sobre «Talento Portugués en España», organizada por Fórum dos Portugueses, ha estado presente la diplomática Carmen Silvestre. La número dos de la Embajada portuguesa en Madrid considera un privilegio servir en uno de los socios más cercanos de Portugal, con una relación bajo escrutinio público constante. Para la diplomática, el concepto de soft power está muy presente en la vivencia de los portugueses en el país, pues en las más diferentes áreas acaban por contribuir para la imagen de un Portugal más moderno y positivo. «Hoy en España, decir que se es portugués genera pronto simpatía. Existe una imagen nueva y más positiva. Diferente de la que era hace 15 o 20 años. Las empresas, las iniciativas del turismo, de la cultura y la lengua portuguesa también han ayudado a esta nueva visión sobre Portugal», ha comentado.
Una de las grandes tarjetas de visita de Portugal es su gastronomía, y esta se puede degustar en Madrid. En el Atlantic Corner, todos son recibidos con los brazos abiertos, y los portugueses pueden tener el sabor de casa con los «pececillos de la huerta» y los pasteles de bacalao. Nuno Goucha, empresario de la restauración, ha recordado los duros momentos que la pandemia ha traído. «Son momentos duros para la restauración, especialmente en Portugal». En territorio luso, en los últimos meses, ya han cerrado 200 restaurantes.
Quien también ha participado en este encuentro virtual ha sido el facilitador Paulo Nunes de Abreu, que ha dicho que «la diferencia de escala entre las economías es chocante, y es necesaria una mayor integración para que las empresas portuguesas puedan ser tan buenas o mejores que las catalanas». Actualmente, el mayor banco de Cataluña es ocho veces mayor que la Caja General de Depósitos de Portugal.