El movimiento civil iberista se ha consolidado marcando presencia en la pasada cumbre de los gobiernos de manera unitaria. El Movimento Partido Ibérico, El Partido Ibérico Iber, La Plataforma Civil Ibérica, el diario profesional El Trapézio, La Sociedad Iberista y el medio de comunicación La Discusión, han unido fuerzas por primera vez desde que comenzaron a surgir allá por el año 2012. Estas organizaciones confluyen en el Foro Cívico Ibérico, que para la Cumbre de Viana de Castelo contó además con las adhesiones de Corredor Suroeste Ibérico, Frente Cívico Vilar Formoso-Fuentes de Oñoro y Extremeñería.
En mi humilde opinión y ciertamente de parte, esa es la noticia más significativa de la Cumbre de Viana de Castelo. En las anteriores 32 cumbres, nunca «apareció» un grupo de personas representantes de entidades civiles que proclamaba más unión y vertebración estratégica para la península, bajo la pancarta «Por uma Aliança Ibérica». La noticia es esa, la Sociedad Civil haciendo un esfuerzo en tiempo y recursos plantó sus representantes en la Cumbre y fue capaz de leer un manifiesto reivindicativo, donde se viene a pedir que se les escuche, que los gobiernos cumplan sus acuerdos y que se cree una entidad de cooperación permanente, además de varias medidas concretas.
Porque realmente es algo inédito que se pida más unión, cuando estamos acostumbrados a suplicas en el sentido contrario, donde cada cual pide un mayor trozo del pastel. Pues bien los ibéricos, reclamamos unir las partes para tener un pastel más grande del todos podamos alimentarnos, sin disenso.
El Manifiesto ha tenido repercusión en algunos medios como la RTP, O Observador de Portugal o La Cadena Cope de España, sin embargo los demás medios generalistas no han cumplido con su deber informativo y no dan la noticia del Manifiesto ni se enteran, o no se quieren enterar que existe, desde 2012, un movimiento iberista consolidado. Una pena que los medios de comunicación no dispongan de suficiente capacidad para captar la realidad y entreguen sus esfuerzos a buscar confrontaciones y a las luchas partidistas. Prometemos no hacer nada de eso para tener mayor repercusión.
Pero además de la reunión iberista, los gobiernos hicieron su cumbre que ciertamente ofreció unos resultados algo pobres y una vez más un desencuentro en asuntos ferroviarios que se trata de esconder, paro ya con poco éxito.
En honor a la verdad los resultados resultan mas evidentemente pobres porque veníamos de dos cumbres en las que se firmaron los dos principales acuerdos que rigen actualmente las relaciones entre Portugal y España, la Estrategia Común de Desarrollo Transfronterizo en 2020 en Guarda y el Nuevo Tratado de Amistad en Trujillo en 2021.
Por otro lado todo lo relativo a la «excepción ibérica» en el ámbito energético ha llevado la coyuntura de las relaciones entre España y Portugal a un nivel extraordinario. El asunto del Gaseoducto al que finalmente ha accedido Francia con una sustancial modificación que consiste en llevar el tubo vía marítima desde Barcelona a Marsella, en vez de avanzar por tierra atravesando los pirineos, (lo cual es de más rápida ejecución) supone otro puesta en valor de lo ibérico.
En el asunto ferroviario, Portugal apuesta por «priorizar» el eje atlántico por el norte, llevando el tren de alta velocidad primero entre Oporto y Vigo, y posteriormente entre Huelva y Faro; el eje radial central Madrid-Lisboa se pospone y no se considera prioritario. No parece que esto sea visto siempre con buenos ojos en España, se observa un recelo que parecía superado. Los argumentos económicos e incluso sociales empujan a que el eje Madrid-Lisboa sea sino prioritario, porque es un término que implica discriminar otros territorios, claramente necesario. El PIB de la Comunidad de Madrid supera al de todo Portugal, por tanto los intercambios entre Madrid y Lisboa generalmente van a favorecer un flujo mayor en sentido Lisboa que viceversa. Ciertamente la situación ferroviaria entre Portugal y España es sonrojante, solo la conexión por el litoral norte entre Vigo y Oporto que demora unas 2,5 horas es competitiva.
Durante la cumbre se presentó la Guía del Trabajador Transfronterizo, algo verdaderamente chocante. La Guía es un documento que explica de «manera sencilla los derechos y los servicios a los que pueden acceder los trabajadores transfronterizos de España y Portugal». No dudo de la utilidad del documento, pero se trata de algo parecido a un folleto de información administrativa, que no es algo para presentar por las más altas instancias gubernamentales de los países. Esto se hace para dar una especie de sucedáneo del comprometido «Estatuto del trabajador Transfronterizo» en el que se deben remover los verdaderos obstáculos que enfrentan estos trabajadores. Parece que los gobiernos retroceden ante el monstruo de 12 cabezas que es la burocracia transnacional.
Otro asunto destacado fue la presentación de la Estrategia de Turismo Transfronterizo 2022-2024 que comienza del siguiente modo «La raya hispano-portuguesa es el territorio fronterizo más antiguo y dilatado (1.234 km lineales) de la Unión Europea, y contiene los recursos culturales, históricos y paisajísticos más genuinos y desconocidos del suroeste comunitario, soportes de las señas ibéricas de identidad, fraguadas por la ósmosis de civilizaciones autóctonas e importadas sobre la encrucijada paisajística-atlántica-mediterránea más rica de Occidente».
Es interesante la alusión a «señas de identidad ibéricas» pues nuevamente, como se hizo en la Declaración conjunta con motivo de las conmemoraciones de la vuelta al mundo del Magalhaes-El Cano, los gobiernos reconocen la identidad ibérica, que es para nosotros los iberistas, el alimento ideológico que nos mueve. En otro orden de cosas, recomendaria dejar de usar expresiones como «más rica de occidente», pues occidente es muy grande y cada cual es rico y genuino a su modo y manera, ninguna más que otro, tampoco los ibéricos. La nueva Estrategia es un documento muy interesante del que recomiento vivamente su lectura, en él se lanzan ideas como la creación de la marca la raya, que sea reconocible para el turista y la creación de medios digitales que promuevan las agendas turísticas y culturales de la zonas fronterizas. Desde aquí brindo a las autoridades la experiencia de El Trapezio para colaborar en estos menesteres.
La Cumbre pasó rápido pero ha supuesto un nuevo hito para el iberismo, desde Viana do Castelo todos las entidades tienen un Manifiesto en el que reconocerse y una Slogan para avanzar juntos: «Por uma aliança ibérica».
