Évora y Badajoz estarán conectadas por una línea ferroviaria de alta velocidad para pasajeros en 2023. Así lo anunció por primera vez el primer ministro luso, António Costa, en la XXXII Cumbre Hispano-Portuguesa celebrada en Trujillo. Las declaraciones del mandatario sirvieron para romper un tabú, ya que hasta ahora sólo se había asegurado el enlace entre ambas ciudades para mercancías.
La nueva conexión hispano-lusa por vía terrestre ya está en fase de obra y tendrá trenes circulando a 250 km/h. Así, se podrá viajar desde Lisboa hasta Badajoz en dos horas y hasta la capital española en cinco. Y todo ello está previsto “en poco más de dos años”, según el gobierno portugués.
Como recoge el periódico portugués Publico, el Ministerio de Infraestructuras ya admitió este proyecto hace años. No obstante, la ministra de Conexión Territorial, Ana Abrunhosa, dijo en 2020 que la alta velocidad hasta Madrid no entraba en los planes del gobierno luso. La cuestión incomodaba a António Costa y era considerado como «tema tabú» para el primer ministro. Pero la incógnita quedó resuelta cuando Costa habló públicamente sobre el transporte de pasajeros y aseguró que la línea estaría lista en 2023.
Punto estratégico
En la Cumbre Hispano-Portuguesa, Costa consideró a Extremadura como «estratégica» para las conexiones ferroviarias. El primer ministro destacó que el Gobierno luso apoya “la conexión entre Lisboa y la frontera española, sea para pasajeros, sea para mercancías”. Extremadura se colocaría así “en una posición estratégica, con el acceso a los puertos mediterráneos de España, pero también a los puertos atlánticos de Portugal y en especial al puerto de Sines”.
