El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha asegurado que las sanciones y los bloqueos adoptados sin el apoyo del derecho internacional «sólo sirven para penalizar a las partes más vulnerables de la población». «Utilizar las sanciones y los bloqueos sin el apoyo del derecho internacional es algo que sólo sirve para penalizar a las partes más vulnerables de la población. Necesitamos la paz para superar los grandes retos que tenemos que afrontar y eso supone cambios sistémicos profundos», ha declarado el presidente brasileño durante la cumbre entre la Unión Europea (UE) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
«Dividir el mundo en bloques antagonistas sería una locura», ha aseverado Lula, quien ha recalcado que la guerra de Ucrania «es otra confirmación de que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas no es capaz de afrontar los retos que tenemos hoy en día frente a la paz y la seguridad». «A menudo sus propios miembros no respetan la Carta de Naciones Unidas. De acuerdo con la Carta de Naciones Unidas no aceptamos el uso de la fuerza como un medio para resolver los litigios», ha expuesto. Ha añadido que Brasil «apoya todas las iniciativas fomentadas por los distintos países y regiones pidiendo un alto el fuego inmediato, un cese de las hostilidades y una paz negociada».
Ha criticado que la invasión rusa de Ucrania ha supuesto «un aumento del hambre, de la desigualdad y, a la vez, está aumentando el gasto militar global». «En vez de eliminar el hambre de tantos millones de seres humanos, estamos gastando miles de millones de dólares para alimentar la maquinaria de guerra, que sólo causa guerra, destrucción y más hambrunas. Esta cumbre entre la Unión Europea y Celac es el momento de decir basta. Otro mundo es posible, que es el que tenemos que construir entre todos», ha manifestado.
Por otro lado, ha dicho que la conclusión del acuerdo comercial entre la UE y Mercosur (Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay) es «una de las prioridades» para Brasil. «Tiene que basarse en la confianza y no en las amenazas. La defensa de los valores medioambientales que todos compartimos no puede ser una excusa para el proteccionismo», ha aseverado. Ha agregado que proteger la selva amazónica «es un deber de todos». También ha lamentado que el modelo de gobernanza global «hace que continúe la asimetría, la desigualdad; reduce las oportunidades para los países en desarrollo». Destacó que la cooperación entre la Celac y los Veintisiete «debe reflejar las realidades y prioridades de las dos orillas del océano Atlántico».
«Para la región de América Latina y del Caribe esto puede plasmarse en un esfuerzo a favor de la reducción de la desigualdad, la erradicación del hambre y de la pobreza», ha señalado. Ha pedido «una asociación que ponga fin a la división internacional del trabajo, que condena a América Latina y al Caribe a suministrar materias primas y mano de obra mal pagada y discriminada».
Asimismo, ha llamado a regular el uso de las plataformas digitales para «luchar contra la ciberdelincuencia y la desinformación». «Lo que es un delito en el mundo real debería ser también un delito en el mundo digital. Las aplicaciones y plataformas digitales no pueden derogar las leyes laborales por las que tanto hemos luchado. La precariedad debe ser combatida», ha subrayado.
