Al igual que cualquier otro sector de la economía, el periodismo también está atravesando una crisis sin precedentes. Con un ritmo de trabajo donde las noticias tienen que actualizarse cada minuto, la profesión sigue siendo una actividad esencial y los periodistas siguen trabajando (tanto sobre el terreno, como en régimen de teletrabajo) para producir información de calidad.
Pero, como otros negocios, las pérdidas de ingresos (especialmente, los publicitarios) están poniendo en peligro la supervivencia de mucha prensa, especialmente la de carácter regional. Esta quiebra publicitaria ocurre paradójicamente con un aumento del share televisivo (con los informativos siendo, con diferencia, los programas más vistos, tanto en Portugal como en España), y con un acceso masivo a los medios digitales. Dado que estos contenidos son, en su mayoría, gratuitos, los grupos de comunicación han empezado a tener problemas de recaudación.
«Lay-off» y ayudas públicas
Lay-off (ERTEs; despidos temporales) es una de las palabras del año, y ya hay medios de comunicación que han adoptado este régimen. En Portugal, el periódico deportivo A Bola, y Global Media Group (grupo titular de publicaciones como el Diário de Noticias y la Rádio TSF) han reubicado a sus periodistas y al resto del personal en casa o en horario reducido. Algunos de los afectados se han quejado de no haber sido debidamente informados de lo que iba a suceder.
Para no tener que recurrir a esta situación, el periódico regional O Setubalense ha utilizado el poder de los medios sociales para crear una campaña de crowdfunding, con el propósito de pagar a sus empleados durante el período de pandemia.
El Estado pagará publicidad
Tras una carta abierta firmada por los directores de los veinte mayores periódicos portugueses, y después de una propuesta presentada por el Bloco de Esquerda (que quería una ayuda a los medios de comunicación de 15 millones de euros), el Gobierno, a través de la ministra de Cultura, ha mostrado su disposición a apoyar a los medios con la adquisición de espacios publicitarios. Sobre estas ayudas, la Plataforma de Media Privados (Plataforma de Medios Privados) considera que este importe «añade poco o nada a los fondos tradicionalmente consignados en el presupuesto para los mismos fines».
El Sindicato de Periodistas lo considera una buena medida, pero insuficiente para responder a la presión que están sufriendo los medios. Del importe que se entregará, el 75% se destinará a los medios de comunicación nacionales, y el 25 % a los organismos regionales y locales. Además de las ayudas del Gobierno, que deberán llegar a los medios dentro de dos semanas, la Santa Casa da Misericórdia de Lisboa (Santa Casa de la Misericordia de Lisboa) va a apoyar a la prensa con una mayor inversión en los periódicos y otros medios de comunicación.