Casi una treintena de tecnópolis de diez países se han unido en la recién creada Red Iberoamericana de Parques Científicos y Tecnológicos. La entidad cuenta con el asesoramiento de Málaga TechPark, que ha asumido su coordinación junto a la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB), impulsora de la iniciativa. En ella participan Portugal, Argentina, Brasil, Colombia, Costa Rica, Cuba, México, Panamá, Paraguay y Uruguay.
La Red se presentó en la jornada ‘El papel de los parques científicos y tecnológicos en el fomento de la innovación, la transferencia de tecnología, el emprendimiento y la cooperación internacional con Iberoamérica’, en la que participaron representantes políticos de varias administraciones.
En la elección del recinto malagueño para asumir la coordinación de la red iberoamericana, destaca la Junta de Andalucía, se ha tenido en cuenta su trayectoria, ya que está considerado uno de los ecosistemas de innovación más importantes de España. También ha influido en la decisión la relación permanente que mantiene con diferentes entidades latinoamericanas, como parques tecnológicos, universidades, administraciones públicas, institutos de investigación o centros tecnológicos.
Esas relaciones se han materializado en diferentes convenios, misiones tecnológicas, labores de asesoramiento o visitas institucionales y empresariales que han permitido a la tecnópolis fortalecer la unión entre las empresas ubicadas en su recinto y entidades latinoamericanas, así como el desarrollo de proyectos.
Además, el parque malagueño ha colaborado con el Clúster Internacional TIC’, que fue promovido por el Distrito Tecnológico de la ciudad de Buenos Aires, y al que pertenecen los parques de Brasil, México, Panamá, Costa Rica, Colombia y España; y ha participado en el proyecto INCUBA.
La constitución de la Red tiene como finalidad reforzar la estrategia de innovación de Iberoamérica a través del fortalecimiento de las empresas y su vinculación con los grupos académicos instalados en los parques que forman parte de dicha red. Para el diseño y fomento inicial de esta iniciativa, la SEGIB ha contado también con la colaboración de la Universidad de Málaga, además de con el respaldo de la Junta de Andalucía y el Gobierno central. También tiene un papel clave SEGIB, organismo internacional que da apoyo a 22 países que conforman la comunidad iberoamericana de la que forman parte estados de Iberoamérica de lengua española y portuguesa, así como los tres de la Península Ibérica (España, Portugal y Andorra).
Más de 40 solicitudes de instalación
Según datos de la Junta de Andalucía, el Parque Tecnológico malagueño ha recibido desde el mes de febrero más de 40 solicitudes de instalación de nuevas empresas sobre una superficie global aproximada de 13.000 metros cuadrados. Estas demandas proceden tanto de la propia comunidad autónoma como del ámbito nacional e internacional. Málaga TechPark cerró el pasado año con un incremento en el empleo del 0,36% con respecto al año anterior, alcanzando las 20.345 personas (57% hombres y 43% mujeres). Sus empresas se sitúan en 621 y la facturación alcanza los 2.104 millones de euros.
Sus instalaciones acogen ya a unas 60 empresas extranjeras, que representan el 35% del empleo total del recinto y cuentan con profesionales de más de 30 nacionalidades.