Galicia y Portugal unen fuerzas hasta 2026 en el proyecto europeo «GRESINT», con el objetivo de mejorar la selección y tratamiento de residuos de envases mediante el uso de la inteligencia artificial. Con un presupuesto cercano a los 800.000 euros, esta iniciativa busca modernizar las infraestructuras existentes de gestión de residuos y optimizar sus resultados.
La vicepresidenta segunda y «conselleira» de Medio Ambiente en funciones, Ángeles Vázquez, ha destacado durante la clausura de la jornada «Una transformación digital inteligente en el proceso de recogida y clasificación de residuos», el lanzamiento oficial de un proyecto que lidera la empresa pública Sogama, y que cuenta con la participación de otras entidades de Galicia y Portugal.
Los trabajos incluirán la instalación de nuevos sensores en cintas y motores de las plantas de tratamiento de Cerceda y Oporto, con el objetivo de separar mejor los residuos; el uso de dispositivos para detectar de manera ágil los materiales que no pueden recuperarse; y el empleo de inteligencia artificial y de robots para agilizar todo el procedimiento. Además, se prevén tres pruebas piloto en estas plantas, y la información obtenida se almacenará en una base de datos para un acceso fácil y seguro por parte de los integrantes de la plataforma.
Esta colaboración entre Galicia y Portugal no sólo contribuirá a mejorar la clasificación de envases para su posterior reciclaje, sino que también reforzará la concienciación social sobre la importancia de una correcta clasificación de los residuos en origen. Una industria verde ibérica cada vez más fuerte y coordinada.
