El Grupo CaixaBank obtuvo en 2019 un beneficio atribuido de 1.705 millones de euros. De los cuales, 332 millones, un 20%, del total, fueron generados en el mercado portugués a través de su filial: el Banco Portugués de Investimento (BPI).
Excluyendo Portugal, el resto de la contribución al resultado del Grupo se lo reparten tanto el negocio bancario y de seguros (1060 millones, 62% del beneficio), como el negocio de las participaciones (313 millones, 18%).
En 1995, La Caixa entró como accionista minoritario en el BPI. En 2012, se convertiría en primer accionista (44,1%). Y, desde finales de 2018, el BPI forma parte del Grupo CaixaBank, porque el banco español pasó a tener la totalidad del capital del banco luso.
El Banco Portugués de Investimento (BPI) es la quinta mayor entidad financiera que opera en Portugal en términos de activos, con una cuota de mercado del 10 % en crédito y en depósitos de clientes. Tiene su sede central en Oporto y está centrado en la actividad de banca comercial en Portugal.
El BPI también tiene participaciones minoritarias en bancos africanos (48,1% del BFA en Angola y 35,67% del BCI en Mozambique).
