El Ejecutivo socialista liderado por Antonio Costa recorrerá Portugal con la iniciativa «Governo mais próximo». Cada mes, los ministros y secretarios de Estado visitarán un distrito diferente del país para conocer los problemas y las necesidades de sus respectivas poblaciones. Durante estas visitas, las autoridades han hecho acto de presencia en los diferentes ayuntamientos, en los que harán Consejos de Estado, entre otros eventos.
A lo largo de la legislatura, el Gobierno portugués visitará, tanto los distritos continentales, como los de las regiones autónomas de Azores y Madeira. Se busca tener un contacto más directo, tanto con los diferentes territorios, como con las diferentes poblaciones que ven el centro de decisión (Lisboa) muy lejos de sus vidas.
Esta medida gubernamental se toma después de las elecciones de octubre, que volvieron a poner en la agenda mediática la posibilidad de dotar de mayor autonomía a las regiones (más o menos al estilo español). La regionalización ya ha sido un tema recurrente en algunos debates. Es un proyecto que, aunque tiene voces que lo defienden, como el partido Bloco de Esquerda, otros no consiguen ver la idea con tan buenos ojos, como es el caso de Rui Rio, el líder del PSD; o el presidente de la República, Marcelo Rebelo de Sousa.
Rebelo de Sousa sostiene que la regionalización no debe llevarse a cabo de una manera «precipitada», sino de forma moderada. Considera que el plan de acercamiento del Gobierno a la población es parte de una verdadera descentralización de poder. Un plan que ha logrado que tres Secretarías de Estado (Valorización del Interior; de la Acción Social, y de la Conservación de la Naturaleza, de los Bosques y de la Ordenación del Territorio) hayan ido a Bragança, Guarda y Castelo Branco, respectivamente.